La violeta africana o saintpaulia es una planta de interior con flor de la familia Gesneriaceae. Esta familia se caracteriza por ser originarias de las zonas más altas de África oriental (de ahí su nombre) donde tiene un clima tropical bastante cálido. Por eso, pueden ser utilizadas como plantas ornamentales de interior.
Tipo de planta | Interior | ||
Exposición al sol | Alta e indirecta | ||
Riego | Moderado | ||
Resistente al frío | Temperatura óptima 17-21ºC | ||
Floración | Todo el año | ||
Ventajas | Color de las flores | ||
Inconvenientes | Sensible al exceso de riego |
La violeta africana es una planta muy adaptada a los hogares. Esta planta de interior destaca por sus flores de colores y sus hojas aterciopeladas. Las hojas como decimos tienen unos pequeños pelos. Tienen una forma redonda o de corazón y son bastante gruesas. Las flores son pequeñas y en forma de ramilletes en la parte central de la planta. Pueden ser lilas, rosadas, azuladas o blancas, pero las más comunes son las violetas, como no.
La violeta africana puede hacer unos 20 centímetros de altura, así que es una planta ornamental más bien pequeña, ideal para poner como centro de mesa o para decorar en algún estante o cómoda.
¿Cómo se debe cuidar una violeta africana?
Los cuidados de la violeta africana o saintpaulia son muy similares a de la mayoría de plantas de interior ornamentales más comunes.
En cuanto al riego es necesario tener la tierra húmeda pero no encharcada. Para ello recomendamos regar el sustrato directamente sin pulverizar y al cabo de unos minutos sacar el agua restante del portamacetas. Si por algún caso empezamos a observar manchas amarillas en las hojas o que se pudre, debemos reducir el riego. Si vemos que está muy afectada, podríamos sacarla de la maceta y poner un sustrato seco para intentar remediar la situación. Aparte, si las hojas empiezan a tener un moho gris o también manchas amarillas podría ser porque las hemos mojado en exceso. Por lo tanto, es importante hacer bien los riegos de la violeta africana. Mojando únicamente el sustrato y eliminando el exceso de agua.
En cuanto al abonado, en caso de no tener mucha floración deberíamos hacer un abonado con algún producto rico en fósforo, hierro y potasio. Estos estimularán la floración, así como el aspecto.
La temperatura que están acostumbradas es alta, no están nada adaptadas al frío. De hecho, tenemos que evitar dejarlas en zonas muy frías porque no nos sobrevivirán. Las temperaturas que deben estar las violetas afrivanas son entre 15-25 grados centígrados y las óptimas entre 18 y 22ºC, es decir las temperaturas habituales de las casas. En caso de que veamos coloración amarilla también puede ser que sea porque la temperatura es demasiada baja.
¿Dónde colocar violeta africana?
Como hemos dicho, la violeta africana necesita mucha luz pero indirecta. Por lo tanto, lo que te recomendamos es tenerla cerca de una ventana o una zona con mucha luz, pero que está protegida del sol directo. En caso de que observe que las hojas empiezan a coger tonalidades amarillas, quizás hará falta moverla a un espacio con más temperatura, también si vemos que coge tonalidades marrones en forma de motas, quizás sea que haya tenido una exposición demasiado alta a luz directa.
Como ves, la violeta africana es la planta de interior ideal por su color y sus hojas tan características. Con este artículo tendrás todo lo que necesitas para tener una violeta africana en buen estado en casa. Si tienes alguna duda o si quieres más información, contacta con nosotros. Si quieres otras alternativas de plantas ornamentales puedes consultar otras plantas de interior con flor.
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